El Retorno de la Inversión (ROI) es una métrica financiera utilizada para evaluar la eficiencia de una inversión o comparar la eficiencia de varias inversiones. El ROI mide la cantidad de retorno en relación con el costo de la inversión. Para calcular el ROI, el beneficio (o retorno) de una inversión se divide por el costo de la inversión; el resultado se expresa como porcentaje o razón.
El término ROI proviene de "retorno de la inversión" usado en el siglo XIX para referirse al porcentaje de beneficio obtenido sobre una inversión. Por ejemplo, si una empresa ganaba $1,000 en una inversión, el ROI era del 100%.
El cálculo del ROI es sencillo y se utiliza ampliamente en todo tipo de inversiones. La fórmula es: ROI = Valor final / Inversión inicial × 100%
Supón que inviertes $1,000 y tras un año el valor es $1,200. El ROI sería: ROI = 1,200 / 1,000 × 100% = 120%
Esto significa que tu inversión devolvió un 120% de tu inversión inicial, o $200 de ganancia.
Un ROI positivo indica éxito, uno negativo indica fracaso. Cuanto mayor el ROI, mayor la eficiencia de la inversión.
El ROI es un cálculo simple y no tiene en cuenta otros factores que pueden influir en el retorno, como cambios en el costo o moneda.